Regálate un ratito contigo

¿Lista para darte ese respiro que tanto necesitas?

Regálate un momento de presencia.

De esos que no se explican, solo se sienten.

¿Lista para dejar de exigirte y empezar a escucharte?

A veces pasan días, o semanas, en los que todo va tan deprisa que te olvidas de ti. De cómo estás de verdad. De lo que tu cuerpo intenta decirte.

De lo que necesitas, sin filtros ni deberes.

Un autorregalo es eso:

Un espacio solo para ti, donde no tienes que hacer nada perfecto.

Solo permitirte parar, respirar, sentir.

Aunque sea unos minutos. Aunque solo cierres los ojos, pongas una mano sobre tu pecho y respirar.

No necesitas técnicas, ni respuestas, ni hacerlo bien.

Solo darte permiso para volver a ti. Porque ahí es donde empieza todo.